El hecho de que los mercados celebraran un informe del IPC del 3%, que los supersubyacentes subieran el 4,2% y que las expectativas de inflación estuvieran totalmente desancladas indica que la Fed ha perdido por completo el control de las condiciones financieras. Si intentan volver a tomarse en serio la inflación, el mercado no les creerá.